Tanto García Carmona como Pérez Noriega han afirmado que lo “conveniente” sería dejar hoy sobre la mesa este punto incluido en la Gerencia de Urbanismo y analizar “este grave problema” para la ciudad antes de tomar una decisión cuyas consecuencias el grupo regionalista “desconoce” en el caso de que Transitia decida acudir a los tribunales. Es “inaceptable”, han añadido, que se haya “ocultado” durante 12 meses y ahora se intente “pasar de tapadillo” en una reunión de la Gerencia.
Según han explicado, el 21 de junio de 2012, la empresa concesionaria del servicio de transporte urbano pide la rescisión del contrato por incumplimiento del ayuntamiento en el pago. Y el 4 de abril de 2013, la empresa presenta un recurso de reposición, interesando igualmente la rescisión del contrato, sin que en todo este tiempo y pese al “interés” de la oposición en este tema el equipo de gobierno “haya dado la cara”.
En su opinión, lo que pone de manifiesto esta situación es “la incapacidad manifiesta y evidente” de Calderón y de su equipo de gobierno, así como el “despropósito” conque gestionan el Ayuntamiento y que “no trabajan lo suficiente”, tal y como demuestra que en este caso en 12 meses “no se ha movido ni un papel”.
Por otro lado, García Carmona y Pérez Noriega han pedido a Calderón que explique a los vecinos cómo es posible que estén satisfechos de la relación con Transitia cuando esta empresa en sus escritos habla, refiriéndose al Ayuntamiento, de «burda estratagema para justificar la grave situación de incumplimiento del ayuntamiento»; alude a una resolución municipal en los siguientes términos: “incurre en errores manifiestos, tiene por ciertos
hechos rotundamente falsos y manipula interesadamente la realidad hasta límites inaceptables”; o hablan de «enemistad manifiesta», según el PRC.
A los regionalistas, han insistido, les resulta sorprendente que los únicos satisfechos con el servicio de transporte urbano, un servicio que nos cuesta a los torrelaveguenses 13 millones de euros, casi 4.000 euros al día, sea el PP. Ni los usuarios, ni los trabajadores, ni la propia empresa adjudicataria están contentos, solo el equipo de gobierno.
Por otro lado, y con el objetivo de votar con criterio, García Carmona y Pérez Noriega han anunciado que intentarán mantener una reunión con representantes de Transitia para conocer su punto de vista.
Por último, han recordado que no es la primera vez durante esta legislatura que el PP tiene problemas con una empresa contratada por el ayuntamiento y se han referido a la paralización que sufre la revisión del Plan General de Ordenación Urbana al decidir el PP, de forma unilateral, rescindir el contrato. “Ya llueve sobre mojado”, han afirmado.
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