Desalojado el Salón de Plenos por las protestas de la Asamblea en Defensa de Las Excavadas

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Con gritos de «Vergüenza, vergüenza»; «Quien vende nuestra tierra no nos representa» y «El Próximo PSIR, en tu jardín», han impedido que Cruz Viadero diera paso al Orden del Día

El acceso al Salón de Plenos estaba restringido mediante una lista

Cruz Viadero intentó iniciar el Pleno más de una docena de veces, antes de ordenar el desalojo

Tenso Pleno Extraordinario vivido en Torrelavega, con la sonora protesta de la Asamblea en Defensa de Las Excavadas. Esta convocatoria era el segundo intento de celebrar un Pleno que ya fue fallido por las incesantes protestas del colectivo, aunque en esta ocasión el Alcalde de Torrelavega, José Manuel Cruz Viadero, ha tomado la decisión de desalojar el salón plenario para poder debatir el orden del día.

El acceso al Salón de Plenos ha estado rigurosamente controlado mediante una lista nominal, de forma que sólo se podía acceder al salón con la debida autorización tras aportar la identificación mediante el Documento Nacional de Identidad (DNI).

Un activista se encadenó a un radiador

El Alcalde de Torrelavega, José Manuel Cruz Viadero, intentó, en al menos una docena de ocasiones, dar inicio al Pleno. Pero tras las palabras: «Punto número uno del orden del día», el regidor no podía hacerse oír más.

Sus palabras eran ahogadas por los gritos de los integrantes de la Asamblea en Defensa de Las Excavadas, bajo lemas como: «Vergüenza, vergüenza»; «Quien vende nuestra tierra no nos representa» y «El próximo PSIR, en tu jardín», entre otros.

Cruz Viadero esperaba varios segundos entre intentona e intentona, pero los ánimos de los activistas volvían a caldearse cada vez que el alcalde tomaba la palabra. Esta situación llevó al regidor a reunir, de forma muy breve, a los portavoces de los grupos, para anunciar su decisión de desalojar el Salón de Plenos.

Según han informado fuentes policiales, los integrantes del colectivo se arriesgan a ser multados por los incidentes acaecidos en el Pleno, aunque la cuantía de esa sanción es potestad de la Delegación del Gobierno.

El desalojo no ha estado exento de dificultades. Los activistas no han hecho uso, en ningún momento, de actitudes violentas, aunque ha sido necesaria la intervención de los Bomberos de Torrelavega para liberar al conocido activista Florentino Muñoz Lunate (Tate), que se había encadenado a un radiador.